Por encargo de la
Hermandad patronal de Nuestra señora de la Antigua de Almuñécar, me dispongo a
realizar en verano de 2015 los proyectos que serán llevados de cara a tan
señalada efeméride, entre los cuales, sobresale el diseño de la presea que
servirá para coronar canónicamente a tan antigua y venerada imagen de la Virgen
María. Se trata de una corona de reducidas dimensiones, apenas 28 cm de
altura, y que formará un conjunto con la del niño que porta entre sus brazos de
unos 12 cm de altura.
Por la complejidad y tamaño de la propuesta
decido usar un diseño propio del arte de la joyería, prescindiendo de las
características habituales en las labores de orfebrería que imperan en las
hermandades y cofradías, acercándonos más al estilo y ejecución de las grandes
preseas de joyería de principios de siglo XX, y que poseen las grandes devociones
de este país.
Como hilo
conductor de la base arquitectónica del diseño hago uso del estilo gótico,
semejante a la datación de la talla a la que va destinado el proyecto, pero en
su conjunto y debido al carácter de joya que se le otorga en toda su extensión,
podemos calificarlo de una pieza en estilo modernista, por lo que vinculamos el
estilo propio de los Reyes Católicos tan importantes en la historia de esta
imagen con un lenguaje más propio de la joyería.
Se trata de una
virgen de campaña que acompañaba al ejército e iba clavada a la silla de una
caballería que servía como estandarte de las fuerzas militares. Pudo ser ese su
origen y su procedencia. Y es plausible que entrará con aquellas tropas de
orgullosos castellanos y que ocupará, como imagen venerada por la huestes de
Reyna Isabel y Rey Fernando, el patronazgo de la hasta entonces Al-Murecab por
donde entraran (Abderramán) y salieran árabes (Boabdil). Un icono perentorio
que imponía su condición de símbolo de la conquista en nombre del Dios de los
cristianos.
Una relevante importancia histórica que queda
reflejada en los cuatro símbolos que portan los cuatro arcárgeles, Gabriel en
honor al título de la parroquia de la Encarnación, Miguel, patrón del barrio más
antiguo de la villa, y en la parte trasera Rafael y el Ángel custodio
completando los Santos arcángeles,que entre sus manos acogen las siglas de los
Reyes Católicos, el yugo y las flechas. Alusivas a la historia son también las
granadas que coronan el canasto alternadas con los pináculos góticos, y bajo
estas uvas y espigas referentes al carácter sacramental de la Hermandad.Un
total de cuatro imperiales flanqueados por engarces de ornamentación gótica que
sustentan tres zafiros tallados rectangularmente en cada uno de
ellos, se unen en su parte mas alta para sustentar el orbe coronado por
una cruz.
Es en la parte
inferior del canasto donde se hacen mas evidentes las labores de joyería con
incrustaciones de piedras preciosas, alternando cuatro tondos inspirados en la
vidrieras góticas de las principales seos levantadas por Isabel y Fernando con
las flores de lis, símbolo de la realeza en España.
La obra está siendo
ejecutada en oro, plata y piedras preciosas por el granadino Alberto Quirós y
será puesta sobre las sienes de la patrona sexitana el 6 de Agosto de 2016 por
el arzobispo de archidiócesis en un solemne pontifical, probablemente en el
emblemático parque del Majuelo.
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